Mayo 6 de 2019: Sobre por qué llegué a este ambiente

Humanos y señoritas:

Los personajes que rondamos el ambiente hemos llegado ahí bajo diferentes circunstancias; en caso de la parte contratante, las historias se vuelven muy diversas: demasiada soledad, conflictos para llevar una vida social normal, un ocio mal canalizado y una bomba de hormonas en constante ebullición.

Bueno, posiblemente les haya dado las razones por las cuales yo, el Cimarrón Confeso, llevo casi 4 años en el ambiente escort.

Cuando vienes de una familia conservadora de las que cada fin de semana va a misa como si se tratara de un ritual de hacienda, el sexo se convierte en una curiosidad casi inalcanzable desde que comienza la pubertad. Las clases de doctrina te hablan de Adán y Eva, las faldas se llevan a la altura de los tobillos, se reza el Rosario cada vez que se prepara café y la indignada de tu abuela te tapa los ojos cuando una pareja se besa en la televisión.

Llega el momento en el que uno comienza a romper la voz de niño y a tener vello en partes que antes no tenía, cuando se da cuenta que sus sueños se vuelven viscosos y su cuerpo se vuelve más grande y fuerte de lo que era. Las niñas de la escuela - siempre un paso adelante en todo lo que a madurez refiere - se ven más bonitas y ese inquieto miembro entre tus piernas ha comenzado a tomar nota.

Sin embargo, un joven puberto siempre es demasiado feo, demasiado ñoño, demasiado serio, demasiado gordo, demasiado tímido, un largo etcétera. Todo es consecuencia de prejuicios y fantasmas que surgen cuando nadie parece entender el fuego que comienza a arder en las entrañas de un ser sin forma como un trozo de arcilla.

Desafortunadamente, la vida pasa demasiado rápido y existen prioridades; la mía nunca han sido las relaciones personales. Siempre tuve la necesidad de terminar una carrera, de tomar, comer y leer mucho, así como de tratar de vivir tantas experiencias pudiera, pero por X o Y razón el sexo casual no se dio. Cuando les digo que no soy un tipo normal, tómenlo en toda la extensión de la palabra.

Ante la falta de sexo casual y habilidades sociales, terminé en este vicio, involucrado de lleno en los avatares de este ambiente. Arrepentirse de algo sería hipócrita porque lo he disfrutado mucho, incluso cuando las cosas no han salido como las pensaba. Aunque mi sangre está bastante quieta en estos momentos, aún no he pensado en retirarme.

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